En la UOC se conoce a las primeras semanas como “el mes del susto”, ya que una gran parte de sus estudiantes abandonan los estudios en ese periodo. Se ha desarrollado una Inteligencia Artificial para reducir esta tendencia. Con el algoritmo de PDAR se monitoriza cada día y se tiene en cuenta además los datos del perfil del alumno en cuestión, su rendimiento dentro del curso y su implicación en la vida universitaria a través de los clics y otras acciones diarias. Los universitarios que se prestaron a participar —firmaron un consentimiento informado— abandonaron un 12% menos al final del curso que los compañeros que no colaboraron. Ahora se estudiará escalar este proyecto piloto a todo el campus.